El triángulo es el único polígono que no se deforma cuando actúa sobre él una fuerza, por eso se utiliza asiduamente en la construcción. Es una estructura sencilla formada por barras, que gana rigidez gracias a su forma.
Podemos encontrarlos en todas partes, en torres de alta tensión, en las grúas, en las tiendas de campaña, en algunos puentes, en atracciones de feria y en algunos edificios.
A base de triangulación se han logrado vigas de una considerable longitud y resistencia, llamadas vigas reticuladas o arriostradas, usadas mucho en la construcción de grandes edificaciones que necesitan amplias zonas voladas y sin pilares, consiguiendo una resistencia superior a las vigas macizas.
El acero y la madera son los materiales más utilizados en el sector de la construcción. Principalmente el acero, es el que más se emplea en España, por su alta resistencia, su bajo coste, la rapidez de montaje y su capacidad de reutilización.
Hay muchas estructuras famosas que están formadas a base de triángulos unidos entre sí:
- La Torre Eiffel (París, Francia), de 300 m de altura.
- La Rueda del Mileno, el London Eye (Londres, Reino Unido), una noria de 135 m.
- El puente Golden Gate (California, Estados Unidos).
- La Cúpula reticular poliédrica F-12, para el Teatro-Museo Dalí de Figueras (Girona).
Como hemos podido ver, el acero es un material muy resistente y permite elaborar estructuras ligeras.
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